calle7unasolavoz

2023 – 3:04

Todas las madres merecen respeto, incluidas las trabajadoras del sexo, tanto si eligen este camino por necesidad como por empoderamiento. Defender sus derechos y su seguridad significa cuestionar las normas patriarcales y reconocer el trabajo sexual como un derecho humano. Fomentando la empatía y reduciendo el estigma, podemos redefinir la sexualidad como un aspecto democrático, catártico y transformador de la experiencia humana.